La libertad gloriosa

Lectura: Romanos 8:18-21

“Porqué también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.” v.21

Cuando vemos la situación que vive nuestro mundo, sus carencias, desigualdades, miserias, guerras, falta de sustento, familias sin hogar, niños en extrema pobreza y necesidad, el corazón se llena de desesperanza, tristeza y dolor. Podemos preguntarnos el por qué de esta realidad que nos avergüenza como seres humanos.

Estamos acostumbrados a ver el mundo desde esta perspectiva desalentadora y pesimista y pensamos si tiene arreglo, si alguna vez habrá cambios que conduzcan a otra realidad.
La palabra de Dios afirma que llegará un día en que todo cambiará. Será el cumplimiento de un tiempo de esperanza indescriptible donde todo será transformado. Las Escrituras afirman que habrá un futuro glorioso para toda la tierra cuando los creyentes nos manifestemos en
la gloria de Dios.

Será un tiempo donde todo lo que vivimos cambiará, no habrá las tristezas ni carencias que tenemos hoy y culminará un anhelo esperado de transformación, llenando el corazón de gozo y alegría cumplidos. Los hijos de Dios mencionados por el apóstol Pablo son los creyentes que en todas las edades han recibido a Jesucristo como su Salvador y Señor, que se han arrepentido de sus pecados y han aceptado por fe su sacrificio en la cruz. Para nosotros que vivimos hoy, si damos el paso de recibir a Jesucristo como nuestro Salvador, seremos parte de la libertad gloriosa que se manifestará en aquel día. Todos somos invitados a ser parte de ese día.

Somos llamados a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

José Luis Briones, España

Jesús nos ofrece el regalo de su salvación eterna

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